4 de octubre de 2011
23:45 pm Vigo. Cansada, aunque inquieta no quiero meterme en la cama.
(El titulo?… de «La mirada del otro«)
Merecido o no, reconozco que me falta cariño.
Ahhhh!. Me chirría. Cómo chirría eso que por lo bajinis un uno susurra a un otro cuando estos hablan de un aquel otro : «está falto/a de cariño»…
El que lo tenga todo (el cariño) que tire la primera piedra.
Algunos pensaréis: «yo no me puedo quejar». Y encontraremos seguro dadores: amigos, hijos, parejas,…a los que adjudicar nuestro haber en el amor. Siempre que hay un debe hay un haber. Y siempre que hay un haber es porque hay un debe. Nos falta entonces amor o me falta a mi razón?
A mi me falta (amor).
Encontrarme con los que me lo ofrecen, no saber recibir el de los que dicen lo merezco, confundir el puro con el contaminado, conocer el deseado,…me hace pensar que me falta.
Ahora que he engordado cambio gramos de peso por gramos de amor. Pero claro, quien quiere gramos de peso? y quien no quiere pesos de amor?…
Y si nos falta y lo sabemos, por qué no lo damos?. Porque yo como Paulina, creo en la energía que se mueve en espiral.
Y si lo que damos recibimos, por qué me falta a mí, si yo siento que lo mío no es más que dar?.
Pues sólo me queda pensar que recibir es lo que peor se me da. O eso, o es sólo que me falta de verdad.
(Os recomiendo la película…)
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